Mattia Giani se desvaneció en el campo de juego y fue atendido de urgencia por los médicos.
Mattia Giani, jugador del Castelfiorentino United 1925, equipo de la quinta categoría del fútbol italiano, murió a los 26 años después de sufrir una paro cardíaco en el partido ante el Lanciotto Campi.
“Mattia no sobrevivió. En estos momentos faltan las palabras. Una tragedia terrible. Un dolor desgarrador. Solo podemos dar un fuerte abrazo a la familia y a su club”, comunicó en Facebook Alessio Falorni, alcalde de Castelfiorentino, municipio situado a unos 50 kilómetros de Florencia.
El jugador se desplomó en el Estadio Municipal Ballerini en el minuto 14 del partido y necesitó de una reanimación con masaje cardíaco en el campo de juego, antes de utilizar el desfibrilador. Fue trasladado al hospital en una situación crítica.
Giani superó con complicaciones la noche y esta misma mañana falleció en el hospital de Careggi (Florencia, norte) en el que fue ingresado.
El Castelfiorentino United suspendió todas las actividades deportivas para este lunes y lamentó la muerte del joven futbolista.
Susto en el partido entre Roma e Udinese por una situación similar
El partido correspondiente a la fecha 32 de la Serie A entre Udinese y Roma, se suspendió a los 15 minutos del segundo tiempo, luego de que el futbolista Evan N’Dicka se desplomara en el campo de juego al sentir un fuerte dolor en el pecho. Rápidamente, fue asistido por los médicos, pero que alarmó a sus compañeros, entre ellos Leandro Paredes y Paulo Dybala.
El defensor francés comenzó a sentir un dolor en pecho y de inmediato se tiró al suelo. Daniele De Rossi, entrenador de Roma, comenzó a pedir asistencia médica de manera enérgica para su jugador.
Después de unos minutos, la ambulancia ingresó al campo de juego para llevarse al futbolista, quien no perdió el conocimiento y logró levantar su pulgar para calmar a sus compañeros, entre ellos Paredes y Dybala, quienes se reunieron en el campo de juego para hablar con los otros jugadores de la Roma. Sin embargo, el exvolante de Boca siempre se mantuvo cerca del árbitro Luca Pairetto.
De Rossi se negó a disputar lo que quedaba del partido que estaba 1-1. Así fue como Pairetto habló con los capitanes de ambos conjuntos, el argentino Roberto Pereyra (que había anotado un gol para su equipo) y Bryan Cristante, para comunicar la decisión de suspender el encuentro. Por su parte, Pereyra y Cristante se acercaron a las tribunas del estadio Bluenergy para explicarle a los hinchas lo que sucedió.