El fiscal federal ingresó cerca de las 11 al juzgado de Dolores. El juez Ramos Padilla le imputa ocho delitos, entre espionaje, extorsiones y la realización de cámaras ocultas ilegales.
Exactamente 184 días después de haber sido declarado en rebeldía, el fiscal federal Carlos Stornelli se presentó a declarar ante el juez de Dolores Alejo Ramos Padilla en el marco de la causa donde está imputado por formar parte de una red de espionaje paraestatal, extorsiones a empresarios y presiones a dirigentes políticos y abogados. Deberá responder por al menos ocho delitos y si acepta responder preguntas la indagatoria podría extenderse más de 12 horas.
Stornelli arribó al juzgado de la calle Buenos Aires al 100 acompañado por su abogada, Raquel Pérez Iglesias, quien fue designada días atrás y a quien Ramos Padilla aceptó como defensora hace días, luego de varios cambios en la defensa del fiscal federal, que intentó designar como abogado a Martín Cerolini, pero fue rechazado por el magistrado de Dolores debido a que existían “intereses contrapuestos”. Es que Cerolini fue el abogado del agente aduanero Carlos Liñani, que está imputado en la misma causa.
Semanas atrás Stornelli anunció que asistiría a la indagatoria ante Ramos Padilla por el caso D’Alessio, el entramado de espionaje ilegal, extorsiones y coacciones a empresarios, abogados y periodistas que salió a la luz por la denuncia del empresario Pedro Etchebest presentada en febrero pasado en el juzgado de Dolores, que relató haber sido extorsionado por el falso abogado Marcelo D’Alessio para no ser involucrado por Stornelli en la causa de los cuadernos.