Un equipo de agentes especializados trabajó en San Martín y Buenos Aires ante una denuncia por “olores nauseabundos”. El problema se originó en una cocina de un salón de fiestas de la zona.
Minutos antes de las 9, un llamado al 911 alertó sobre “olores nauseabundos” en la esquina de San Martín y Buenos Aires, compatibles con una pérdida de gas. De inmediato se puso en marcha el protocolo para estas situaciones, con la participación de agentes de la Subsecretaría de Prevención y Emergencias, a cargo de Nicolás Kripper, preventores urbanos y bomberos, a los que luego se sumó personal de Gasnor y el Samec.
Se cortó el tránsito y se evacuaron viviendas y locales comerciales, y también se pidió abrir puertas y ventanas en forma preventiva. Luego de una hora de testeo de los artefactos de inmuebles de la zona y de la red que pasa por la vereda, se constató que no procedía de ahí el olor sino que emanaba de una cocina utilizada en un salón de fiestas que funciona en el lugar.
Una vez solucionado el inconveniente se habilitó el paso de los automóviles, retornando el desarrollo normal de las actividades.
