La familia del joven de 18 años quien murió al no soportar los ejercicios físicos bajo 40 grados de calor, apunta contra otros cadetes que le habrían negado agua en medio del entrenamiento.
La investigación por la muerte de Emanuel Garay, un joven de 18 años que falleció en su primer entrenamiento como cadete de la policía de La Rioja suma nuevos sospechosos.
Garay no resistió el fuerte entrenamiento.
El abogado de la familia, Nicolás Azcurra, amplió la denuncia ante la Justicia e involucró a seis cadetes de segundo año, quienes habrían dado las órdenes en los distintos ejercicios.
De acuerdo con la denuncia, los cadetes de segundo año les negaron el agua a los 83 ingresantes mientras los obligaban a realizar un entrenamiento que para la familia del joven fallecido era más parecido a una tortura que a una preparación física.
La denuncia se realizó bajo la figura de “delito de lesiones graves, gravísimas, seguidas de muerte, incumplimiento de los deberes de funcionario público, abuso de autoridad en las que estarían involucrados los nombrados entre otras personas”.
El joven de tan sólo 18 años murió al no soportar el ejercicio.
Por estos días, la investigación intenta determinar la responsabilidad de quienes actuaron en ese entrenamiento el lunes 5 de febrero.
Hasta el momento hay ocho oficiales detenidos acusados de “homicidio doloso”, y ahora se denunció a otros seis cadetes por “lesiones gravísimas seguidas de muerte”.
El escenario de las torturas más grave fue una cancha de básquetconocida como “La sartén” por la temperatura que alcanza. El lunes hubo 40 grados de sensación térmica en La Rioja. Poco después de las 16, Emanuel colapsó luego de nueve horas de ejercicios extremos.
Tras la muerte del joven de 18 años, que soñaba ser policía como su papá y otros integrantes de su familia, desplazaron al jefe de la Fuerza, Luis Páez, y al secretario de Seguridad, Luis Angulo.