Hace 6 días dos empleadas municipales de Rosario de Lerma se encuentran en huelga de hambre tras quedar cesante 60 trabajadores contratados por decisión del Intendente.
Una de las mujeres que se encontraba haciendo la huelga tuvo que ser hospitalizada al descompensarse. Su nombre es Cintia Ibañez, tiene 5 hijos, dos de ellos con discapacidad.
Este reclamo de los trabajadores se inició cuando comenzaron a solicitar ropa de trabajo, el 3,5% del 6% que restaba que les paguen desde el Municipio y los 1500$ que les otorgaba la provincia.
El municipio habia entrado en conciliación obligatoria, pero según lo que comenta Raul Rodriguez, vocero de los empleados, es que el Intendente Ignacio Jarsún no respetó la conciliación y dejó cesante a 60 empleados contratados.
“Jarsún afirmó que desde Nación les dijeron que empiece a achicar el Estado, que empiece a achicar el Municipio”, afirmó Rodriguez en diálogo con Canal 7.
Hasta hace unos días habían dos trabajadoras, luego se sumo otro.
El vocero manifestó que el intendente Jarsún hechó a una policía de tránsito con 16 años de servicio y que se encontraba en período de lactancia. Y que el Intendente argumentó que “eso le pasa por no haber salido a caminar por el candidato que él apoyaba”.
Asismimo aseguró que hay trabajadores con 14 y 16 años de antigüedad que deberían haber pasado a planta permanente y que el intendente la designó a su mamá en cargo político en la cooperadora, como así también a un primo y varías personas que no son de Rosario, sino “que trae gente de Salta”.
También Rodriguez comentó que son los mismos trabajadores de tránsito los que de su bolsillo se compran los uniformes sumado a que el municipio no le cumple con ART.
