Este domingo, familiares, amigos y alumnos de Leonor Pedroza le dieron el último adiós en una emotiva ceremonia en el cementerio local. La reconocida profesora de danza, cuyo legado marcó generaciones de bailarines, fue despedida con una coreografía realizada por sus alumnas, en un tributo cargado de emoción y gratitud.
Los restos de Pedroza fueron depositados en un mausoleo junto a los de su madre, en un símbolo de unión y amor familiar. Durante la despedida, la comunidad salteña recordó su dedicación y compromiso con la enseñanza de la danza, así como su aporte invaluable a la cultura.
Su legado perdurará en cada uno de sus alumnos y en el arte que impulsó con pasión.