Las intensas lluvias caídas sobre la ciudad de General Güemes durante las dos últimas semanas dejó al descubierto un grave problema de deterioro en los techos del viejo inmueble ubicado sobre calle Alberdi al 300, donde desde hace más de una década funciona el Concejo Deliberante.
El pasado viernes 11 después de la lluvia caída durante la madrugada, algunas de las oficinas que ocupan los concejales güemenses se vieron afectadas por una copiosa filtración de agua, que como el caso de la oficina del edil Nelson Ordoñez, afectó todo el cableado de su sistema de eléctrico, generando un potencial peligro para las personas que desempeñan sus tareas en ese sector.
Otro de los sectores muy afectados fue la oficina de archivos, dijeron los concejales, visiblemente alarmados por esta situación. Remarcaron que el archivo de un Concejo Deliberante es “el alma del trabajo de todos los cuerpos y la memoria de todo lo legislado en una comuna”.
De tiempo inmemorial
El inmueble donde actualmente funciona el Concejo Deliberante comparte su espacio con la escuela primaria privada El Divino Niño. Lo que se sabe es que la estructura tiene una antigüedad que al igual que la historia del pueblo, pocos recuerdan. A punto tal que hasta principios de este siglo se desconocía que dicha propiedad pertenecía al municipio. Lo que sí se sabe es que el inmueble fue construido para que allí funcione un mercado municipal.
Años después, el mercado se trasladó hasta su actual ubicación frente a la plaza central. Así, el espacio liberado fue ocupado por los talleres de la Escuela de Educación Técnica Juana Azurduy. Pasaron muchos años más hasta que la Escuela Técnica pudo tener su propio edificio, pudiendo concentrar por primera vez sus aulas junto con los talleres en un solo espacio físico.
Un espacio propio
Hasta ese momento muchos pensaban que el inmueble pertenecía al Ministerio de Educación, otros que era de propiedad privada. “Hubo mucha información por recopilar antes de que se tenga la certeza que efectivamente era una propiedad de la comuna”, aseguraron.
El espacio liberado por la EET Juan Azurduy fue cedido en comodato a la escuela El Divino Niño, mientras que sus oficinas exteriores ubicadas sobre calle Alberdi fueron destinadas para el funcionamiento del Concejo Deliberante. Aunque con anterioridad, cuando la municipalidad no contaba con un edificio propio, allí funcionó el sector de Receptoría.
Por la antigüedad del inmueble, varios problemas edilicios comenzaron a aparecer en la última década, principalmente en sus baños los que tuvieron que ser reparados en varias oportunidades.
Luego de las tormentas, esta última semana, fueron los techos de chapa los que comenzaron a transformarse en un problema, situación que deberá tener con una urgente solución para mantener la seguridad de todas las personas que se desempeñan en el Concejo Deliberante güemense.
“Seguramente esto es una consecuencia de la falta de mantenimiento, el Concejo no cuenta con un presupuesto propio para invertir en los arreglos, dependemos totalmente del municipio, espero que se hagan cargo en forma urgente”, manifestó el concejal Ordoñez uno de los más afectados por el estado de su oficina.
El edil se encuentra evaluando la posibilidad o no, del regreso del personal a dicha oficina, por el riesgo que representa.
Sobre esta situación, el intendente Sergio Salvatierra manifestó: “Desde que asumimos invertimos en reparaciones del edificio municipal. Por falta de recursos volcadas en arreglos, hay sectores muy precarios. Tuvimos que arreglar la sala de situaciones en forma completa, la oficina de prensa es prácticamente nueva, lo mismo para las oficinas de Habilitaciones”.