Ghislaine Maxwell fue una figura central en los aberrantes abusos sexuales de Jeffrey Epstein, el fallecido magnate pedófilo. Para los investigadores fue su mejor amiga, su novia por un tiempo, la encargada de manejar todos sus asuntos, incluso los más asquerosos.
Ghislaine Maxwell fue detenida este jueves por el FBI por su presunta implicación en el escándalo de abusos a adolescentes que llevaron a prisión a su multimillonario amigo, quien después perdería la vida en un aparente suicidio.
Desde que Epstein murió en prisión en agosto de 2019, muchos se preguntan no solo qué secretos se llevó a la tumba sobre este caso, sino también quiénes fueron parte del llamado “anillo de tráfico sexual” de menores.
Desde que comenzaron las investigaciones surgieron nombres que van desde príncipes ingleses hasta expolíticos de alto rango de EE.UU., pero el que más sobresalía era el de la exnovia.
En diciembre del año pasado, una de las mujeres que se declaró víctima de Epstein señaló a la BBC que Maxwell controlaba a las mujeres que estaban al servicio del multimillonario
“Ghislaine controlaba a las chicas. Era como la madame“, dijo Sarah Ransome en el programa BBC Panorama.
“Ella era como de los elementos básicos de la operación de tráfico sexual y siempre visitaba a Jeffrey en la isla (donde tenía una residencia el empresario) para asegurarse de que las chicas estuvieran haciendo lo que se suponía que debían estar haciendo”, declaró.
“Ella sabía lo que le gustaba a Jeffrey. Con intimidación ayudó a mantener los estándares de Jeffrey, intimidaba a las chicas, así que esto fue un esfuerzo conjunto”, señaló.
Maxwell fundó una ONG, el Proyecto TerraMar, dedicado a preservar los océanos y fue invitada a dar una charla Ted y a hablar en Naciones Unidas sobre el tema.
Pero en los últimos años, poco se supo de ella.
Se cree que se marchó de Estados Unidos y que vendió su casa en Manhattan en 2016. Hasta este jueves, en el que fue arrestada.