La familia duerme en una carpa sobre el lecho del río.
A 16 días del desalojo de los Martínez, los ánimos siguen caldeados por la Quebrada del Toro. La casa dejada por la familia ante una orden judicial sería ocupada por otra familia, en carácter de casera del reclamante de estas tierras.
A todo esto, se conoció que un supuesto error de interpretación podría echar por tierra la resolución judicial de desalojo emanada del juez de garantías Diego Rodríguez Pipino en contra de la familia Martínez de la comunidad originaria de Los Alisos, sitio en medio de los cerros, ubicado frente al paraje El Alisal, a unos 10 kilómetros de Campo Quijano.
La orden judicial partió para desalojar a un tal Jorge Martínez, quien no figura como integrante de la comunidad de Los Alisos. En su nombre, desalojaron a Irene Martínez, titular del inmueble, quien acredita su pertenencia a esta comunidad indígena.
Tomar cartas en el asunto
Ante este panorama, el Ministerio de Asuntos Indígenas intervendrá en el caso ante la Justicia. La familia Martínez, entre tanto, sigue pernoctando en el lecho del río Toro a escasos metros de donde fuera su hogar desde hace años.
