El terrorista salafista que cometió este viernes el último atentado terrorista en Francia fue identificado como Redouanne Ladkim, un joven de origen marroquí de 26 años, conocido de los servicios de seguridad por radicalización. Había llevado a su pequeña hermana al colegio en Carcassone, antes de iniciar la acción que dejó tres personas muertas y una docena de heridos. Un acto heroico de un gendarme que decidió aceptar ser rehén, a cambio de la liberación de los otros, impidió una tragedia aún mayor. Daech (ISIS) reivindicó el atentado terrorista en su agencia de prensa.
Ladkim fue abatido en la tarde del viernes por las fuerzas especiales de la Gendarmería en el supermercado U de Trèbes, una pequeña localidad francesa, donde había asesinado a dos empleados y exigía la liberación de Salah Abdeslam, el único sobreviviente de los atentados en los cafés de París en 2016. Tenía ficha S y estaba siendo vigilado por los servicios de inteligencia.
Un helicóptero de la Gendarmería francesa sobrevuela el lugar de los hechos. / Reuters
