Intervienen las secretarías de Gobierno, Ambiente y Servicios Públicos, Desarrollo Social, Obras Públicas y Cooperadora Asistencial.
Una fuerte tormenta se desató desde las primeras horas de hoy sobre la ciudad de Salta. Según el Servicio Metereológico con asiento en el aeropuerto Martín Miguel de Güemes, a las 9 de la mañana se registraban 21.7 milímetros de agua precipitada, mientras que a las 11:30 ese valor se había duplicado, alcanzando los 44 milímetros. El total de enero hasta el momento alcanza los 223.8 mm; y aún resta calcular el agua precipitada a lo largo del día.
Nicolás Kripper, subsecretario de Prevención y Emergencias de la Municipalidad informó que “estamos alertas y en contacto con las comisarías de los diferentes barrios y con los Centros Integradores Comunitarios (CIC). El protocolo de emergencias por lluvia está activado desde muy temprano y permanecerá a lo largo del día. Del mismo participan las secretarías de Gobierno, Ambiente y Servicios Públicos, Desarrollo Social, Obras Públicas y Cooperadora Asistencial”.
Pablo Linares, agente municipal de la Secretaría de Desarrollo Social, informó que la comuna asiste a las familias que, a causa de la abundante lluvia, sufrieron el ingreso de agua y barro en sus domicilios.
Se duplicó la cantidad de agua caída en poco más de dos horas
Se comprobó que la importante cantidad de agua precipitada en tan poco tiempo, provocó que algunos canales se llenaran rápidamente, alcanzando su tope.
Por su parte, el secretario de Ambiente y Servicios Públicos, Gastón Galíndez, informó que los canales no se encontraban obstruidos y funcionaron correctamente, pero el caudal de agua provocó que, en algunos casos, vean rebalsada su capacidad.
“Se envió al personal a la calle desde el primer momento de la lluvia a verificar el estado y funcionamiento de los canales”, explicó Galíndez. Hasta el momento, los canales relevados por la Subsecretaría de Políticas Ambientales son El Pilar, Pachi Gorriti, Villa Lata (zona Norte); Esteco (macro centro); Irigoyen (zona Sur); Oeste (zona Oeste Alta y Baja); Velarde (zona Sureste); Roberto Romero (zona macrocentro) y Tinkunaku (zona Este)
Una vez bajados los caudales comenzaron los trabajos de limpieza y retiro de residuos y todo lo arrastrado por la lluvia. “Las cuadrillas de operarios trabajan en dar las respuestas necesarias a las demandas y pedidos respecto a las hojas y ramas caídas durante la lluvia y que obstruyeron las bocas de tormentas “, detalló Galíndez.
El estado de los ríos
Personal de Prevención y Emergencias recorre también los principales ríos que atraviesan la ciudad y el límite con otros municipios.
En el caso del río Arenales, se informó que el mismo está crecido, con mucho caudal de agua pero no presenta ninguna emergencia hasta el momento. Se lo controla muy de cerca porque, en caso de una crecida mayor, se debe brindar especial atención a los barrios ubicados en las cercanías.
Por otro lado, el río Ancho se encuentra con un importante caudal, casi al límite de su capacidad. Al igual que en el Arenales, el alerta se mantiene activo en caso de precisar evacuar a los vecinos de la zona.
Finalmente, en el río Vaqueros el agua baja muy oscura por el arrastre de sedimento pero no presenta riesgo para el puente.
En caso de emergencia los vecinos deben llamar al 911. Todos los organismos municipales y provinciales derivan de forma inmediata el pedido, teniendo en cuenta el tipo de emergencia, la zona y otros factores.
