Se trata de un joven de 25 años oriundo de la ciudad de Embarcación que se encontraba trabajando en la provincia vecina de Tucumán. Hace un mes y medio que está varado.
Esta es una de las tantas historias de salteños que están esperando que el gobierno de la provincia los escuche. Es más fácil repatriar a un salteño dentro del país que a varios que se fueron al extranjero. Cuando hay voluntad política se pueden resolver estas cuestiones, pero por lo visto no la hay en el ejecutivo provincial.
