Luego de casi una década sin acceder a financiamiento externo en moneda extranjera a mediano y largo plazo, el Gobierno nacional concretó una nueva colocación de deuda en dólares por USD 1.000 millones. Se trata del bono BONAR 2029N, que fue adjudicado con una tasa anual del 9,26%.
El título está denominado en dólares, paga un cupón del 6,5% anual con intereses semestrales y prevé la amortización total del capital al vencimiento, fijado para el 30 de noviembre de 2029. La operación se realizó bajo legislación argentina y recibió una fuerte demanda: se presentaron ofertas por más de USD 1.400 millones de más de 2.500 inversores.
Desde el Ministerio de Economía destacaron que la tasa lograda se ubicó unos 100 puntos básicos por debajo de bonos similares ya existentes, lo que interpretaron como una señal de mayor confianza del mercado en la situación macroeconómica del país.
Los fondos obtenidos serán destinados a cubrir vencimientos de deuda previstos para enero, particularmente el pago de amortizaciones de bonos 2029 y 2030. En total, durante el primer mes del año próximo el Estado deberá afrontar compromisos por alrededor de USD 4.200 millones. El objetivo oficial es cumplir con esas obligaciones sin afectar las reservas netas del Banco Central.
El ministro de Economía, Luis Caputo, explicó que esta operación apunta a fortalecer las reservas, mejorar el balance del BCRA y continuar con la reducción del riesgo país, con la expectativa de facilitar el acceso al crédito y atraer inversiones.
Desde el Gobierno remarcaron que la mejora del escenario financiero se apoya en el superávit fiscal, el control de la emisión monetaria y la estrategia de saneamiento del Banco Central. En ese marco, sostienen que la reapertura gradual del mercado de deuda en dólares ampliará las alternativas para administrar los compromisos financieros y consolidar la estabilidad económica.
Tras la licitación, el dólar mayorista registró una leve baja y se mantuvo por debajo del techo establecido por el esquema de flotación administrada del Banco Central, reflejando calma en el mercado cambiario.
