La decisión del canciller tomó por sorpresa al Gobierno Nacional, que buscaba postergar los cambios de gabinete para después de las legislativas. Las tensiones con Santiago Caputo y la reacción oficial.
Este miércoles, la política nacional se sacudió con la renuncia anticipada de Gerardo Werthein al Ministerio de Relaciones Exteriores. La noticia generó malestar en el Gobierno Nacional, ya que se esperaba comunicar cualquier modificación en el gabinete recién después de las elecciones legislativas del domingo 26 de octubre. La decisión descolocó a varios sectores de la Casa Rosada que buscaban evitar nuevas turbulencias en la recta final del proceso electoral.
La renuncia fue presentada formalmente a través del sistema administrativo del Estado con fecha del próximo lunes, pero comenzó a circular por los medios antes de que se hiciera pública desde fuentes oficiales. Según trascendidos, incluso varios funcionarios del Gobierno Nacional se enteraron por los periodistas, lo que generó internas y malestar puertas adentro del Ejecutivo.
Fuentes cercanas al entorno presidencial señalaron que Werthein ya no se sentía cómodo en su rol. Aunque mantenía una relación cercana con el presidente Javier Milei y su hermana Karina, los roces con el asesor Santiago Caputo —figura influyente dentro del espacio oficialista— habrían desgastado la convivencia en el gabinete. El conflicto se profundizó luego de que la agrupación Las Fuerzas del Cielo, liderada por Caputo, lanzara críticas internas hacia el canciller.
Desde la Casa Rosada, la principal preocupación fue que la salida se conociera antes de tiempo, rompiendo el cronograma de comunicación institucional del Gobierno Nacional. Además, Werthein dejó firmadas más de 80 designaciones diplomáticas en embajadas y consulados estratégicos antes de presentar su renuncia, lo que abrió otro frente de conflicto.
El Ejecutivo ya anticipó que anulará esos nombramientos y elaborará una nueva lista cuando se defina al sucesor en Cancillería. Por ahora, la prioridad será evitar más sobresaltos políticos en medio del clima electoral. El desenlace de los comicios legislativos podría definir también otros cambios de fondo dentro del gabinete nacional.
