Médicos sudaneses acusaron a las Fuerzas de Apoyo Rápido de matar a civiles, incluidos mujeres, niños y ancianos, en la localidad de Brima Rashid
Una nueva masacre perpetrada por las Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF, por sus siglas en inglés) ha dejado al menos 27 muertos y 43 heridos en el estado sudanés de Kordofán Occidental, según denunciaron este jueves médicos del país africano. La Red de Médicos Sudaneses indicó que el ataque tuvo lugar el miércoles en la localidad de Brima Rashid y que entre las víctimas se encuentran mujeres, niños y ancianos. Hasta el momento, el grupo paramilitar no se ha pronunciado sobre lo ocurrido.
La Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de Naciones Unidas (OCHA) condenó el episodio y lo vinculó con el impacto creciente del conflicto armado en Sudán, que desde abril de 2023 enfrenta al Ejército regular con las RSF.
“Los acontecimientos en Brima Rashid ponen de relieve los crecientes riesgos que enfrentan los civiles en la región de Kordofán y la urgente necesidad de que cesen las hostilidades, se proteja a los civiles y se proporcione un acceso seguro y sostenido a la asistencia y los servicios humanitarios”, expresó la OCHA en un comunicado.
La ONU también volvió a advertir sobre la situación crítica en la región de Darfur, donde el conflicto actual ha reavivado tensiones intercomunitarias de larga data. En particular, destacó la emergencia humanitaria en la localidad de Tawila, en Darfur del Norte, que alberga a cientos de miles de desplazados por los combates en El Fasher y zonas aledañas.

Los informes humanitarios revelan que apenas la mitad de las necesidades básicas de agua están siendo cubiertas, mientras que la relación de acceso a letrinas ha caído a niveles alarmantes: una cada 150 personas.
“Muchas letrinas de emergencia están colapsando, sin fondos disponibles para su limpieza o reemplazo. El apoyo en materia de higiene es mínimo, sobre todo en zonas remotas, y la distribución de kits de higiene ha sido irregular, ya que las limitaciones de financiación han provocado escasez de suministro. Un brote de cólera en Tawila agrava esta situación, ya de por sí grave”, alertó la OCHA.
El cólera sigue representando un grave peligro en zonas donde escasean el agua potable y las condiciones mínimas de saneamiento. Esta infección intestinal, causada por la bacteria Vibrio cholerae, puede avanzar con rapidez devastadora: una persona sin síntomas puede pasar a una situación crítica en apenas unas horas.
Mientras la violencia se intensifica y las condiciones humanitarias se deterioran, organizaciones médicas y agencias internacionales insisten en la necesidad urgente de un alto el fuego y de una respuesta coordinada que permita asistir a la población atrapada en el conflicto.