El Presidente cuestionó duramente el reclamo de fondos de las provincias. Hoy podría sufrir una derrota en el Congreso. A la par, se acerca al PRO y define la estrategia electoral
A pesar de que un sector del oficialismo busca negociar, el presidente Javier Milei se prepara para una confrontación extensa con los gobernadores por el reclamo de fondos para sus provincias, que este jueves comenzará a tratarse en el Senado.
Las autoridades nacionales saben que el proyecto presentado por los representantes de las 24 jurisdicciones del país podría avanzar en la Cámara alta y, más allá de algunos cuestionamientos reglamentarios, se resignan a una primera derrota legislativa.
El propio líder libertario se refirió al tema y, durante una entrevista, sostuvo que los dirigentes impulsan esta iniciativa en el Congreso porque perjudica a su administración en la antesala de las elecciones bonaerenses.
“La intención de ellos es romper todo, porque saben que, si La Libertad Avanza se convierte en La Libertad Arrasa, ellos tienen un problema, que es que se tienen que jubilar. Entonces, están dispuestos a hacer sufrir a los argentinos todo lo que sea necesario con tal de mantener el poder”, opinó en El Observador.
Luego, en otro reportaje, el ministro de Economía, Luis “Toto” Caputo, reveló una charla en la que le destacó al jefe de Estado su postura: “El dato de que te importa tres pitos el daño que quieran hacer, es la clave”, le escribió el funcionario.
En el oficialismo, hay confianza de ganar los comicios por más de diez puntos de diferencia por sobre el peronismo, que se está reorganizando tras la condena a Cristina Kirchner que la dejó fuera de la competencia.
El miércoles, en pleno feriado por el día de la Independencia, la titular del oficialismo a nivel nacional, Karina Milei, encabezó una conferencia de prensa para anunciar formalmente el acuerdo con el PRO.
Lo hizo acompañada por quienes llevaron adelante las negociaciones por cada una de las partes, Sebastián Pareja y Cristian Ritondo, respectivamente, pero también por referentes locales de los dos espacios.
A pesar de algunas diferencias internas, la funcionaria finalmente logró no solo que Ritondo aceptara que el frente se llame “Alianza La Libertad Avanza”, sino que también el diputado le garantizó contener a los intendentes macristas que todavía tenían algunos reparos con el armado.
“Quiero agradecer a todos los que están acá, la grandeza que tuvo cada uno de ellos para dejar sus intereses particulares de lado, para unir fuerza e ir contra el verdadero enemigo, que es el kirchnerismo”, sostuvo en el acto Karina Milei.
Con la coalición ya conformada, ahora comenzarán las conversaciones para definir los lugares en las listas y, por sobre todas las cosas, quiénes serán los candidatos, para lo cual la alianza tiene tiempo hasta el 19 de julio.
Sin CFK en la contienda, en el oficialismo esperan conocer quién será el rival en la tercera sección electoral, aunque insisten en que la decisión de quién se presentará en esa región no va a depender de los movimientos del PJ.
El Presidente, en tanto, se suma al optimismo de cara a la votación del 7 de septiembre y advierte una intencionalidad de las provincias de perjudicar su plan económico para generar un clima de incertidumbre antes de ese proceso.
“La recaudación a los gobernadores les viene creciendo entre el 7 y el 8%. No corresponde lo que piden. Partieron de una situación de equilibrio y la recaudación creció ese 8%, entre otros motivos, por el IVA”, consideró en la entrevista con el periodista Luis Majul.
No obstante, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, trata de mantener un diálogo cordial con varios de ellos y tiene previsto convocarlos a un encuentro en la Casa Rosada para debatir el asunto en persona.
Hasta el momento, el ministro coordinador había dejado las conversaciones en manos del equipo económico, principalmente en el secretario de Hacienda, Carlos Guberman, encargado del presupuesto nacional.
Sin embargo, las propuestas que llevó el funcionario al Consejo Federal de Inversiones (CFI) no fueron bien recibidas por los mandatarios locales, que inmediatamente después enviaron un proyecto al Senado para dirimir el conflicto en el Congreso.
La iniciativa podría ser tratada sobre tablas este mismo jueves y en la Casa Rosada saben que tienen pocas chances de frenarla, por lo que concentran sus esfuerzos en evitar una sanción en Diputados.
