El Ministro de Salud Pública, Federico Mangione, presentó un informe ante la Cámara de Senadores resaltando una significativa reducción en la mortalidad infantil, que alcanzó un descenso del 40,4% en niños de 1 a 4 años durante 2024, en comparación con el mismo período del año anterior.
En su exposición, Mangione destacó los esfuerzos realizados para identificar y abordar las principales causas de fallecimientos en este grupo etario, como infecciones respiratorias, enfermedades diarreicas y malnutrición. Según el informe, este avance se enmarca en una tendencia decreciente en la mortalidad infantil observada en la última década, con una reducción global del 60% desde 2011.
El ministro subrayó que, actualmente, el 70% de los fallecimientos están relacionados con malformaciones congénitas, neumonía y gastroenteritis, mientras que las muertes asociadas a la desnutrición representan una fracción mucho menor en comparación con años anteriores.
Además, Mangione explicó que el seguimiento de los niños atendidos en centros nutricionales ubicados en Santa Victoria Este, Embarcación y Tartagal ha sido fundamental para mantener estos logros. Destacó también el trabajo coordinado con organismos internacionales como OPS, UNICEF y CIPS, que han facilitado el suministro sostenido de alimentos terapéuticos listos para usar (ATLU), sales de rehidratación oral y pastillas potabilizadoras desde 2020.
En la sesión, los legisladores debatieron la prórroga de la ley de emergencia sociosanitaria, la cual ha permitido implementar acciones esenciales en los departamentos más afectados: Orán, San Martín y Rivadavia. Según Mangione, esta medida ha sido clave para fortalecer la atención sanitaria y responder eficazmente a las necesidades críticas.
“El trabajo realizado en los centros de recuperación nutricional marcó un antes y un después en las zonas de emergencia. Allí, los niños y sus familias reciben atención integral, lo que ha sido fundamental para los avances en la región”, reconoció el senador Manuel Pailler, presidente de la Comisión de Salud.
Finalmente, el ministro admitió que, aunque los logros son significativos, todavía queda mucho por hacer para seguir reduciendo la mortalidad infantil y atender de manera integral los casos que persisten.