Una persona se encuentra con muerte cerebral en el hospital San Bernardo, tras ser atacada en una cancha de fútbol en el oeste de esta capital. Los otros casos fatales: barrio Castañares y en Hipólito Yrigoyen.
Un drama se vivió ayer en barrio Castañares, cuando un joven de 24 años -Santiago Almunge- llegó a esa barriada con intenciones de pasar el Día de la Madre junto a su familia y se encontró con un grupo de jóvenes, quienes lo comenzaron a agredir por razones de momento.
Según el vecindario, el joven se defendió de los iracundos, muchos de ellos casi en situación de calle, pero en la refriega uno de ellos optó por el camino más corto y le descerrajó al joven Almunge un disparo a quemarropa, que le produjo la muerte casi de inmediato. Los delincuentes, con sus instintos saciados, quizá, emprendieron una fuga casi ordenada, sin importarles la víctima.
Los vecinos alertaron a la policía y en pocos minutos llegó la fuerza pública solo para corroborar que la violencia urbana ya se había cobrado una vida joven.
Erica Ceballos, la pareja del muchacho, llegó hasta el lugar y dio su parecer sobre la tragedia que enfrentaba, y más tarde el CIF realizó las pericias de rigor ordenadas por la justicia, mientras la policía intentaba dar con el grupo de criminales. Ya en horas de la tarde se presentó uno de ellos espontáneamente y quedó detenido, luego se capturó a un segundo y se busca dar con el posible “matador”, quien se habría llevado el arma asesina tras consumar el crimen.
En el norte
En tanto, en la localidad norteña de Hipólito Yrigoyen, otro joven perdió la vida durante la previa a los festejos por el Día de la Madre, siendo este ultimado a cuchillo, durante una violenta discusión tras una supuesta ingesta alcohólica.
La fiscal penal María Soledad Filtrín Cuezzo investiga el homicidio ocurrido el sábado en la localidad de Hipólito Yrigoyen. La muerte del joven se produjo en el hospital de Orán.
En tanto, el fin de semana también tuvo muerte en las rutas, al perder la vida un joven metanenense al estrellar su motocicleta contra un ómnibus que se dirigía hacia la ciudad de Tarija, Bolivia, por la ruta 9/34.
Con arma de fuego
Los casos más complejos se produjeron en la ciudad de Salta: uno de ellos resultó fatal -el de Castañares-, en tanto el otro produjo un herido de máxima gravedad, que lucha por sobrevivir.
En ambos casos tanto en el norte como en el oeste se usaron para atacar a las víctimas armas de fuego.
Fuentes aseguraron que en la cancha de barrio Esperanza, la balacera fue nutrida y que la víctima recibió un disparo en la cabeza, con orificio de entrada sin salida.
Por el hecho habría personas detenidas y un arma de fuego secuestrada.
“Entre seis lo agarraron a palos y lo golpearon”
Erica Ceballos, pareja del joven asesinado en Castañares, comentó a El Tribuno que eran seis personas contra su novio y clama por “justicia”, ambos compartían hijos. Santiago estaba en el barrio para festejar el Día de la Madre con unas tías y su pareja confirmó que fue atacado por gente drogada y de mal vivir.
Según le contaron a Erica, alrededor de las 12.30, lo atacaron con palos y su pareja se defendió como pudo dejando rastros de vidrio en la vereda. El hecho ocurrió en el grupo 480, cerca de la escuela Eva Perón. La víctima y su pareja residían en la zona de plaza Alvarado. Lo desconocieron y lo atacaron entre todos. Ese sería el móvil del absurdo homicidio.
