El fundador de Generación Zoe abrió una sucursal en nuestra ciudad. 118 personas denunciaron que el empresario les debe 5.6 millones de pesos y 574 mil dólares.
Este miércoles, comenzó en Goya, Corrientes, el primer juicio oral contra Nelson Leonardo Cositorto, fundador de Generación Zoe, una organización acusada de liderar una estafa piramidal. Cositorto enfrenta múltiples causas judiciales, no solo en Corrientes, sino también en Córdoba, Ciudad de Buenos Aires, Santa Fe y Salta, donde operaba con un grupo de socios.
El monto total de las estafas, según las denuncias de 118 víctimas, asciende a más de 5.6 millones de pesos y 574 mil dólares. Las investigaciones comenzaron en 2022 tras múltiples denuncias contra Generación Zoe, una financiera que tenía una sede en Salta, ubicada en calle Pellegrini 782.
El esquema fraudulento de Generación Zoe
Generación Zoe prometía a los inversionistas rendimientos mensuales de entre el 7,5% y el 10%, bajo contratos llamados “membresías educativas”. Las membresías oscilaban entre 500 y 1.000 dólares, y los inversores podían optar entre distintos niveles: Classic, Premium e Intelligent. Sin embargo, las promesas eran parte de un esquema piramidal, donde el retorno solo era posible con la entrada de nuevos inversores.
El contrato obligaba a los inversionistas a mantener su capital por tres años, y cualquier intento de retiro anticipado conllevaba una multa del 50%. Además, la empresa incentivaba a los inversionistas a atraer a nuevas personas, ofreciendo comisiones por cada referida.
Roles dentro del esquema
Las autoridades revelaron que Cositorto era el director ejecutivo de Generación Zoe, encargado de firmar contratos y recibir el dinero, que luego distribuía a través de diversas cuentas bancarias. Ricardo Gabriel Vilardel actuaba como el representante de Zoe en Salta, recibiendo personalmente el dinero de los inversores y firmando los recibos.
Por su parte, Ana Lucía Vilardel era la secretaria de la sede en Salta, y Jorge Federico Vilardel se encargaba de la atención al público y la gestión de los fondos. Griselda Albornoz, junto a los Vilardel, organizaba reuniones y conferencias para captar más inversionistas.
El juicio recién comienza, y se espera que salga a la luz más información sobre cómo operaba este esquema que afectó a cientos de personas en todo el país.
