En Casa Rosada garantizan que el Presidente aspira a conquistar “un equilibrio perfecto” entre los actores y hablan de “una transformación del poder”.
Con las elecciones legislativas nacionales como punto de inflexión, el presidente Javier Milei analiza los cambios que instrumentará con el objetivo de delimitar los roles del Gabinete y reducir las tensiones internas en el segundo tramo de la gestión.
Si bien la ingeniería estará sujeta al desempeño electoral de La Libertad Avanza (LLA) el próximo domingo, el diagnóstico parece ser compartido: hay determinadas áreas que no funcionan.
Las promesas del mandatario de “reacomodar” el equipo en función de lograr las reformas de segunda generación incluye un posible desembarco del asesor presidencial, Santiago Caputo, quien podría ocupar un cargo formal o aumentar sus influencias en el mismo, y una mayor acumulación de poder de la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei.
“Milei va a lograr un equilibrio perfecto en el que todos van a quedar conformes”, sintetizó a Infobae una importante fuente del círculo que rodea al mandatario. La idea es dar lugar a una “transformación del poder”, en el que las tareas de cada funcionario estén bien delimitadas para intentar evitar las rispideces que atravesaron al Gabinete durante estos veinte meses de gestión.
Bajo el complejo objetivo de tender puentes con los sectores aliados al Gobierno, en las filas libertarias esperan que el mandatario designe a un interlocutor encargado de cumplir con las expectativas, y esperan que ese accionar ordene la comunicación con gobernadores y espacios de buena sintonía.

La multiplicidad de terminales en el oficialismo, que implicaba el contacto con un funcionario diferente en función del tema, supone uno de los errores que apuntan a subsanar. Hasta ahora, si las provincias buscaban hablar del armado debían apelar a Eduardo “Lule” Menem, si querían elevar un pedido a Nación lo hacían con el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, y el ministro del Interior, Lisandro Catalán, y a su vez, encontraban una tercera vía en el asesor presidencial, Santiago Caputo. Esto dio lugar a rispideces internas e incongruencias en los mensajes.
Un importante funcionario se esperanza en creer que, a partir del lunes próximo, las tensiones desaparezcan y el reseteo le permita a la administración libertaria “encolumnar a todos detrás de Milei”. “La idea es dar el aviso de que la interna desaparece. El próximo que abone a algo así, lo echa”, subrayaron a Infobae desde uno de los despachos de Balcarce 50.
Con algunas pistas develadas, luego de la renuncia anticipada del hasta entonces canciller Gerardo Werthein y de las bajas obligadas de Patricia Bullrich (Seguridad), Luis Petri (Defensa) y del vocero presidencial, Manuel Adorni, el propio Milei anticipó que trabajará en el recambio de nombres, pero también en la reorganización de la gestión. “El día 26, a la noche, con todos los números, veré qué tipo de entramado necesito para lograr los objetivos”, contó en una entrevista a la TV Pública.
No se descarta que el mismo domingo, en el bunker ubicado en el Hotel Libertador, Javier y Karina Milei reediten la reunión que tuvo lugar en la ciudad de La Plata mientras esperaban llegaban los primeros resultados bonaerenses. En aquella oportunidad, tanto Santiago Caputo como Patricia Bullrich fueron de la partida.
Con todas las áreas sometidas a evaluación y el compromiso de impulsar un profundo cambio en el equipo, la única garantía de continuidad es la de Karina, pieza fundamental en el entramado libertario. “Su hermana está y estará, siempre, por encima de todos. No hay dudas de eso”, planteó a Infobae un funcionario al conocimiento del estado de situación.

La evaluación de la gestión política y el pedido por la demarcación de los roles
El lunes, con la gestión plebiscitada, se presenta ante los ojos libertarios como el día D. Sin embargo, hay quienes creen que si el mandatario no toma nota de las fallas en la dinámica y no asigna roles claros, se repetirán los errores.
“El principal problema es la gestión política. Producto a los desacuerdos políticos se generó la sanción de una serie de leyes en contra que generaron déficit y eso afectó directo a la economía”, remarcó un interlocutor violeta.
Asimismo, acusó recibo del aviso de los gobernadores que sostienen que, desde hace meses, se sienten desoídos por el Poder Ejecutivo. Para eso, hay quienes proponen al asesor presidencial, quien podría dejar las sombras para adoptar un cargo formal, como el actor a designar para encarnar el vínculo con los aliados, luego de la estrategia electoral “rupturista” que le adjudican a los primos Martín y Eduardo “Lule” Menem.
“Nunca entendimos la estrategia de los Menem. Ni con un triunfo del Gobierno se resuelve el problema porque no vamos a tener mayoría y para el tercer año necesitamos votos no vetos para hacer pasar las reformas”, sostuvo una fuente de Gobierno.
La caracterización es rechazada en la mesa chica de la secretaria general de la Presidencia, donde justifican la prevalencia del “purismo” violeta en las listas de La Libertad Avanza, y garantizan haber logrado alianzas con los gobernadores de mayor compatibilidad en referencia a Alfredo Cornejo (Mendoza), Rogelio Frigerio (Entre Ríos) y Leandro Zdero (Chaco). “Llegamos hablando en contra de la casta y pretendían cerrar filas con todos los que consideramos tal cosa. Es insólito”, retrucó un ladero de la menor de los Milei.
En los últimos días, Santiago Caputo se mostró públicamente en coincidencia con el planteo que esbozó el titular del PRO Mauricio Macri, quien pidió reencauzar el diálogo con sectores aliados para encarar las reformas futuras, pero sabe -al igual que el ex presidente- que con el partido amarillo no basta. “A Macri le queda solo una partecita del PRO. Para la construcción de gobernabilidad que aspiramos, solo no alcanza”, aseveraron desde el caputismo.
A cuatro días de los comicios, desde La Libertad Avanza se muestran expectantes por el resultado que, por estas horas, pronostican ajustado, pero con una tendencia alcista que le atribuyen al haber recuperado la agenda, a la ausencia de derrotas legislativas, y al anuncio del swap de monedas con el Tesoro de los Estados Unidos que tuvo lugar en el tramo final de la campaña.
La cuenta que hacen para el próximo lunes es sencilla: si el Gobierno gana el domingo, aún estrecamente, el día después gozará de tranquilidad cambiaria que le dará el margen necesario para instrumentar las modificaciones con tranquilidad, y por el contrario, si pierden por una diferencia mínima, el escenario podría complejizarse, pero sin grandes sobresaltos. “Perder por poco margen no significa la muerte de nadie. En el peor de los escenarios podemos conseguir el tercio, y con los aliados del PRO y alguno más llegas a 86″, calculó un alfil libertario sobre la nueva conformación del Congreso Nacional.
Lo cierto es que a partir del próximo lunes, Javier Milei diseñará el nuevo equipo que lo acompañará en la segunda tramo de la gestión, y en ese camino, todas las posibilidades están en estudio. Por estas horas, desde su entorno revelaron que el libertario, que hoy cumple años, está cansado producto del arrastre que le implicó el protagonismo en la campaña y se cuida de dar precisiones, porque como planteó, “la mejor forma de arruinar a un funcionario es anticiparle que le va a dar un cargo”.