El político neoyorquino seguirá al frente del bloque en la Cámara Alta aunque en un escenario distinto al del último período, ya sin el control del hemiciclo
Los demócratas del Senado reeligieron este martes a Chuck Schumer como su líder para lo que será un período marcado por la incertidumbre, dado que el partido ya no tiene el control del hemiciclo.
En un comunicado, el político neoyorquino aseguró sentirse honrado de tener la tarea de liderar a los demócratas en lo que describió como un “período crucial para nuestro país”, de cara al regreso de Donald Trump a la Casa Blanca, el próximo 20 de enero.
“Nuestra prioridad es lograr soluciones bipartidistas siempre que sea posible y buscar formas de colaborar con nuestros colegas republicanos para ayudar a las familias trabajadoras. Sin embargo, nuestros colegas republicanos no deben equivocarse, siempre defenderemos nuestros valores”, sostuvo.
Es por ello que el rol de los legisladores demócratas será clave en el próximo período, aunque, de momento, la mayoría de sus miembros han optado por el silencio en tanto definen qué estrategia adoptar.
“Todos están en una especie de modo de espera en este momento. En el Gobierno anterior de Trump había caos todo el tiempo. Creo que es importante elegir las batallas”, opinó la senadora de Nevada, Catherine Cortez Masto.
Uno de los primeros desafíos a los que se tendrán que enfrentar será la aprobación de los nombramientos de colegas y aliados del empresario para formar su gabinete. John Ratcliffe, Kristi Noem, Pete Hegseth y Marco Rubio son solo algunos de los nombres de la lista del círculo Trump que serán votados en la Cámara Alta.
En la antesala de este evento y desde su posición de minoría, Schumer envió una carta a su homólogo republicano, el senador de Dakota del Sur John Tune, pidiéndole que no ceda ante la presión del mandatario electo para dar luz verde a todas sus designaciones y, en su lugar, se mantenga firme en el pedido de verificaciones completas del FBI sobre todos los nominados.
Otros demócratas fueron más agresivos en sus declaraciones, como fue el caso de la senadora de Washington Patty Murray quien, desde su rol como presidente de la Comisión de Salud, Trabajo, Educación y Pensiones, cargó contra la elección de Robert Kennedy Jr. para liderar el Departamento de Salud y Servicios Humanos.
El anuncio es “peligroso” y “nada menos que un desastre”, sostuvo.
