Los cortes fueron efectuados en primera instancia por empleados mineros del sindicato AOMA y luego por docentes autoconvocados, cortando la circulación a través de ruta nacional Nº51. Cabe destacar que debido al mal estado en que se encuentra la ruta nacional Nº40, la única forma de conectar la Puna con el resto de Salta es a través del camino de Campo Quijano.
La imposibilidad de reprogramar se genera por la gran cantidad de turistas nacionales que viajan solo por esta temporada y que no cuentan con las fechas de estadía suficiente para realizar la experiencia.
Si bien aún no hay estimaciones sobre las pérdidas económicas, solo en devolver el valor de la excursión a los pasajeros se prevé $21.600 por cada pasajero nacional y $12.000 por cada salteño, es decir que si todos los pasajeros fueron nacionales, se llegarían a pérdidas de $22 millones de pesos. En este cálculo no se cuenta la liquidación de los trabajadores que participaron de las excursiones fallidas ni de los colectivos y servicios que ya se habían proyectado a usar.
“Estamos trabajando con el ministro de Turismo y los diferentes organismos tratando de acercar a los sectores. Estamos tratando tanto el sector público como privado tratando de acercar propuestas para ver si podemos sortear esta situación”, detalló Vidal Casas.
