Autor: Dr. Julio Razona
Complicidades de gobiernos y oposición a cambio de unos pesos . Misión : TRAICIONAR AL PUEBLO…
Ciudadanos apabullados por la crisis no se organizan defensivamente.
La reacción debe ser controlada y con objetivos claros.
Los análisis de los CONSPIRANOICOS terminaron siendo todos acertados. Aquí otro. La Agenda Perversa logró acelerar sus fines de gobernanza y domino en la Argentina gracias al sometimiento absoluto de oficialismo y oposición. Por ese motivo el gobierno de MM cedió a los K su reelección. Su principal figura, Patricia Bullrich no fue candidata y prácticamente no se hizo campaña en la Provincia de Buenos Aires. Ambos votaron todas las leyes sanitarias ordenadas por la Elite, en el Congreso en forma unánime, convalidaron DNU inconstitucionales y no hubo nadie de esos partidos mayoritarios que interpusiese un Habeas Corpus o un Amparo en beneficio de las personas privadas de su libertad y sus derechos. Ninguno apoyó un pedido de autopsia ante cientos de miles de muertes dudosas. Por el contrario, Larreta, Bullrrich y otros pretendían ir casa por casa a inyectar “voluntarios” o bien fomentaron la delación en un marco de una opresión brutal. Al igual que en el resto de Latinoamerica la Agenda organizó y financió eventos violentos con cualquier excusa para generar un clima de descontento y que asuman gobiernos títeres impresentables, ineptos y absolutamente dominados por el nuevo capitalismo disfrazado de socialismo igualitario Chino. En Argentina ese trabajo sucio y rentado lo hace el gobierno actual: terminar con los nacionalismos, inyectar experimentos secretos y nocivos hasta a bebes, terminar con el campo, feminismo machote, cambio de sexos por decenas de géneros, imperio LGBT sobre el 99,8 % de la población, hambre, aborto, eutanasia, suicidios, muertes digitadas, desabastecimiento y fin de la clase media. El próximo gobierno tendrá que ser otro dominado por las pocas familias megamillonarias, de gustos pedofilicos, adrenocrómicas y megalómanas del Nuevo DesOrden con un camino trazado por el actual, en una crisis permanente que les facilite que nosotros, no “tengamos nada y seamos felices”. Si somos ovejas telecreyentes, mansas, acobardadas y pelotudas, claro.
