A medida que el numero de casos confirmados de coronavirus se disparan a través de Africa, el creciente involucramiento por parte de la Organización Mundial de la Salud ha levantado sospechas entorno a la ONG.
El presidente de Tanzania, John Magufulicomenzó a sospechar de la organización, lo que lo llevó a comenzar una investigación en sobre si la organización es tan confiable y rentable como se cree que es.
Magufuli envió muestras de cabra, una papaya y una codorniz para someterse a una prueba de coronavirus. Posteriormente, cuando las 3 pruebas dieron positivas a COVID-19, el presidente expulsó a la Organización Mundial de la Salud luego de haberlos confrontado públicamente.
Sin embargo, pese a la postura del presidente de Tanzania, esto puede indicar dos cosas: Qué el SARS-Cov-2 es más infeccioso de lo que los científicos entienden hasta ahora, o bien que la Organización Mundial de la Salud ha estado reportando resultados erróneos.
De ser intencionado, algunos creen que se podría tratar de un intento por parte de la Organización para reforzar su credibilidad ante los duros ataques por parte del presidente estadounidense, Donald Trump. Sin embargo, podría tratarse de un error.
Tras darse a conocer los resultados emitidos por la OMS, el presidente Maguguli despidió al director del Laboratorio Nacional de Tanzania, esto en medio de un aluvión de críticas que lo acusan de minimizar el impacto del virus.
Polémicas e impacto del coronavirusen Tanzania
Se cree que el número de casos en Tanzania es incierto debido a que el gobierno se ha negado de manera tajante a revelar dónde fueron manufacturadas las pruebas utilizadas por el personal de salud.
De acuerdo con informes de la prensa internacional, la poca fiabilidad de las pruebas creadas en China ha acrecentado la crisis en Estados Unidos y Europa, esto debido a que muchas de ellas suelen dar como resultado falsos positivos.
En las últimas semanas, el presidente Magufuli ha causado gran polémica con sus inusuales decisiones que ha tomado en torno a la pandemia. Recientemente, solicitó una dotación de té de hierbas que se vende como una falsa cura para el COVID-19.
Y ha lanzado investigaciones que impactan a los laboratorios nacionales, así como a los médicos, que actualmente se encuentran en la línea del frente. En días recientes afirmó que su país tiene demasiados casos, sin embargo, actualmente se contabilizan un total de 503 casos confirmados y 21 decesos.
(Con información de Zero Hedge)