Personas formadas en filas a las afueras de las farmacias se pueden ver en ciudades como Cochabamba.
Pese a los avisos de las autoridades advirtiendo de que el dióxido de cloro no está autorizado para tratar la Covid-19 no frenan a las personas que hacen largas filas en farmacias de ciudades como Cochabamba, una de las más afectadas por la enfermedad en Bolivia.
El Gobierno interino de Bolivia desautoriza el uso del dióxido de cloro y el clorito de sodio para enfermos con COVID-19, incluso advierte de un fraude y del riesgo para la salud, pues este tipo de “soluciones milagrosas” no son medicamentos y su venta puede ser ilegal.
Sin embargo la opinión de los ciudadanos bolivianos difiere mucho de lo que las autoridades dicen , muchos de los pobladores de ciudades como cochabamba han adquirido el producto y lo han consumido en las ultimas semanas, los mismos aseguran que han sentido una mejoría satisfactoria, así mismo aclaran que toman esta opción alternativa después de haberse agotado los intentos por ser atendidos en los puestos de salud públicos que hoy por hoy están sobresaturados de pacientes con síntomas del virus . “Hemos visto que sí tiene respuesta”, asegura Delia, quien señala que en el mercado no se encuentra “nada que nos pueda tratar” contra esta enfermedad en Bolivia.
Las filas en farmacias incluyen a muchos policías y militares, pues hay compañeros fallecidos y contagiados por el nuevo coronavirus al estar desplegados en las calles en tareas de control de la cuarentena decretada en Bolivia.
Fuente : RPP noticias