Una cadena de negligencias quedó al descubierto con el último caso registrado de Covid-19 en Salta, la paciente estaba realizando la cuarentena en un hotel, desde allí fue trasladada hacia un hospital no designado para éstos casos, en el San Bernardo le realizaron una intervención quirúrgica, si bien hasta ese momento los test dieron negativo para coronavirus, lo contradictorio es que no se siguió con el protocolo establecido, la mujer debió ser operada en cualquiera de los dos hospitales que si fueron designados para estos casos, el Centro Regional Covid, (Papa Francisco).
Luego de la operación, la paciente estuvo internada en el San Bernardo luego le dieron el alta, al término de la cuarenta la mujer dio positivo para Covid-19 ese momento recién comenzaron a realizar el análisis de la situación epidemiologica de los trabajadores del hospital San Bernardo para saber cuantos debian entrar en cuarentena, sobre todo teniendo en cuenta que ese hospital no está designado ni cumple con los protocolos y muchos se encontraron desprevenidos en una situación que no estaba prevista.
Ante estos hechos queda al descubierto quiénes dan las órdenes, promueven situaciones por fuera de las medidas de seguridad correspondientes, aquí cabe un interrogante, quién le dio la orden al gerente del Hospital San Bernardo para realizar la intervención quirúrgica de una paciente en cuarentena, en un hospital que no cumple con los protocolos?, lo cierto es que en la cadena de mandos desde lo más alto hasta la última instancia hubo negligencias.
La falta de previsibilidad pone de manifiesto un sistema de salud inconsistente, que no sigue las rutinas establecidas por una cadena de mandos que incumple con todos los protocolos que ellos mismos establecen, en éste caso se hizo todo lo que no se podía hacer, exponiendo a riesgo innecesario a personal hospitalario que ahora tiene más sospechas que certezas.
