Un estudiante del Instituto Nacional, la escuela secundaria más emblemática de Chile, sufrió ayer quemaduras tras explotarle una bomba molotov durante un enfrentamiento con la Policía, en medio de un extenso conflicto entre los alumnos y el municipio de Santiago.
Cuatro encapuchados treparon a uno de los techos del edificio del colegio -ubicado en pleno centro de Santiago-, para lanzar bombas molotov contra efectivos de las fuerzas especiales de la policía que hace semanas resguardan el recinto, escenario de frecuentes enfrentamientos.
Una de las bombas explotó en las manos de uno de los encapuchados, cuyo cuerpo y cabeza recibieron parte de las llamas, según muestran imágenes de la televisión local.
El encapuchado es alumno del instituto y sus lesiones son “menos graves”, confirmó Felipe Alessandri, alcalde de la Municipalidad de Santiago.
“El imputado tiene 17 años, fue detenido por la Policía y será llevado ante la justicia”, dijo por su parte Manuel Silva, fiscal del Ministerio Público en Santiago.
Los estudiantes mantienen una serie de demandas en las que exigen a las autoridades crear protocolos sobre violencia de género, persecución política, mejoras en la infraestructura del instituto, pero además rechazan la implementación de la ley denominada ‘Aula Segura’, que sanciona los hechos de violencia al interior de los colegios.
Pese a que los estudiantes y las autoridades del instituto han sostenido reuniones para resolver el problema, se han multiplicado las manifestaciones y tomas del colegio por parte de alumnos, con un saldo de más de 30 detenidos en tres meses.
El Instituto Nacional fue creado en 1813 y es reconocido como el ejemplo de la educación pública chilena. En la actualidad, el colegio cuenta con más de 4.000 alumnos, todos varones. Tras una polémica votación, en marzo de este año, se determinó el ingreso de estudiantes mujeres, lo que representa uno de los cambios más trascendentes en la historia de este colegio.
