El cuerpo deliberativo aprobó esta tarde en Sesión Ordinaria un Proyecto de Declaración de autoría de la edil Romina Arroyo (GSC). El texto está dirigido al Ejecutivo Provincial y en él se requiere la reducción del incremento de la alícuota del impuesto ingresos brutos a los comercios que tributan en esta provincia, mediante la Ley Nº 8064.

Durante el tratamiento de la iniciativa, la edil Arroyo sostuvo en relación a la temática: “A fines del año pasado se aprobó esta ley que estableció un aumento de la alícuota de los impuestos brutos, lo cual ha generado en el comercio una carga tributaria muy grande”. Y agregó: “Esta medida provocó el rechazo por parte de las cámaras empresariales, ya que implica que los comercios que tributaban 3,6% de su facturación hasta el mes de enero del 2018, comenzaron a pagar un 5% lo cual fue un ajuste y un tarifazo fuerte para el sector”.

En otro tramo de su alocución, la edil sostuvo: “Este impuesto se considera distorsivo porque se aplica sobre el que produce, traslada y vende un producto sin contemplar las posibles pérdidas del contribuyente”.

También se refirieron a la propuesta, ediles de diversas bancadas. Cristina Foffani (PO) indicó durante su alocución: “Rechazo cualquier tipo de baja de la tributación a quienes consideramos que son sectores que tienen el poder de soportar la carga, sobre todo las empresas constructoras”. Por su parte, Lihué Figueroa (PV) señaló: “No voy a acompañar porque me parece que estamos beneficiando demasiado a los comerciantes”.

En los Considerandos del texto se consigna que los empresarios de las PyMEs hicieron notar que el traslado por la suba de ingresos brutos será inevitable, lo que reducirá aún más el poder adquisitivo de los consumidores. Además, se sostiene que la medida desalienta la inversión y la generación de empleo y alienta el desarrollo de actividades ilegales.